Los códigos QR reemplazarán los códigos de barras para 2027: qué cambiará para las empresas, el retail y los consumidores

El código de barras clásico, familiar para cualquier comprador, ha sido una parte esencial del comercio durante más de medio siglo. Sin embargo, el rápido desarrollo de las tecnologías digitales y las crecientes exigencias del mercado han llevado a una importante modernización prevista para 2027.
La organización sin ánimo de lucro GS1, responsable de regular los estándares de marcaje a nivel mundial, ha anunciado la iniciativa Sunrise 2027, cuyo objetivo es la transición de los códigos de barras unidimensionales (1D) tradicionales a códigos bidimensionales de estilo QR, capaces de almacenar mucha más información y que, en esencia, se convierten en auténticas tarjetas de presentación digitales para las marcas.

Qué aporta el nuevo formato digital

El nuevo formato sienta las bases para cadenas de suministro más transparentes, una mejor interacción con los consumidores y una mayor eficiencia en el comercio minorista. En esencia, se trata de un cambio tecnológico profundo en el que cada producto se convierte en un portador completo de información accesible con un solo escaneo desde un smartphone.

Objetivos y propósito del proyecto Sunrise 2027

El proyecto Sunrise 2027 pretende sustituir los códigos de barras unidimensionales —cuyo uso se limita a transmitir datos mínimos— por códigos bidimensionales capaces de ofrecer información completa sobre un producto: desde sus ingredientes y origen hasta sus condiciones de almacenamiento y detalles de garantía.
La iniciativa creará un estándar internacional unificado para que toda la infraestructura minorista —desde terminales POS hasta sistemas de almacén— pueda trabajar con el nuevo tipo de código. Grandes fabricantes, minoristas, empresas de transporte y operadores logísticos ya están probando soluciones de marcaje 2D para prepararse para esta transición a gran escala.

¿Reemplazarán los códigos QR completamente a los códigos de barras tradicionales?

Sí, pero no inmediatamente. Incluso cuando el proyecto esté en marcha, la adaptación llevará años: será necesario actualizar equipos, sistemas POS, líneas de producción y procesos logísticos. En algunos países, la transición puede tardar décadas.
Aun así, la dirección ya está definida y los principales actores del mercado mundial apoyan este cambio.

Cómo funcionan los códigos 2D

Los códigos bidimensionales de estilo QR se escanean de manera similar a los códigos de barras tradicionales, pero ofrecen capacidades completamente nuevas:

• los consumidores pueden escanear el código con su teléfono móvil y acceder a información ampliada;

• los datos se almacenan en un formato más seguro y flexible;

• el código puede servir como herramienta de comunicación entre la marca y el cliente;

• la capacidad de información supera en cientos de veces la de los códigos tradicionales.

Los códigos QR ya se utilizan en muchos empaques, pero su implementación completa en todas las etapas —desde el almacén hasta la caja— se ha visto limitada por la falta de un estándar unificado. Sunrise 2027 elimina esta barrera.

Ventajas de los códigos QR como nuevo código de producto

1. Información del producto ampliada y flexible

Los códigos QR permiten a las marcas proporcionar grandes cantidades de información sin saturar el empaque. El fabricante puede incluir:

• ingredientes, valores nutricionales y alérgenos;

• certificaciones halal, kosher, orgánicas y veganas;

• instrucciones de cuidado para prendas y textiles;

• instrucciones en video y audio para el uso del producto;

• información medioambiental y guías de reciclaje;

• condiciones de garantía y políticas de devolución y cambio;

• historial de producción y logística.

Los códigos QR dinámicos permiten actualizar la información en cualquier momento sin modificar el empaque.

2. Mejora del servicio posventa

Un solo escaneo ofrece acceso a todo el historial del producto:

• fecha de compra,

• condiciones de garantía,

• información sobre devoluciones,

• datos de origen y número de serie.

Esto acelera considerablemente el servicio al cliente, reduce disputas y facilita el trabajo de los centros de servicio.

3. Comunicación de prácticas sostenibles y éticas

Los consumidores eligen cada vez más marcas con prácticas responsables. Los códigos QR permiten:

• mostrar la huella ambiental del producto;

• confirmar el origen de las materias primas;

• describir las condiciones de producción;

• destacar las acciones para reducir las emisiones de carbono.

Al escanear el código, el cliente obtiene una mayor confianza en la marca.

4. Verificación de autenticidad y lucha contra falsificaciones

Los códigos QR ayudan a prevenir falsificaciones, especialmente en categorías como joyería, electrónica y artículos de lujo. Permiten:

• verificar certificados de autenticidad;

• registrar el producto en la base de datos del fabricante;

• proteger al consumidor de imitaciones;

• rastrear artículos perdidos o robados (cuando se usan códigos dinámicos con geolocalización).

5. Optimización de la logística y la gestión de inventarios

Los códigos QR mejoran el control de calidad y aceleran el procesamiento de productos:

• seguimiento de fechas de caducidad;

• control de fechas de producción y entrega;

• automatización del sistema FIFO;

• reducción de desperdicio en productos perecederos;

• disminución de errores logísticos.

El personal del almacén solo necesita escanear el código para obtener toda la información necesaria en segundos.